martes, 3 de junio de 2008

Ámbar Gris

Llamado en árabe 'abir. Sustancia que se encuentra en las vísceras del cachalote. Es sólida, opaca, de olor almizcleño, se ablanda con el calor de la mano. Se puede hallar en masas pequeñas y rugosas, sobrenadando las costas del Coromandel, Sumatra, la isla de Socotra y Madagascar. Fue muy utilizado en al-Ándalus en perfumería y en la producción de afrodisíacos. Al parecer, también se encontraba en las costas andalusíes del Algarve, según el historiador argelino al-Maqqarí, que lo inspiró en el XVII, duraba mucho al ser quemado en pebeteros.

Sirvió de metáfora perfumada a los poetas andalusíes, como en este caso, al soberano de Almería Abu Yahya Mu'izz ad-Daula al-Mu'tasim billah (1052-1091) quien envió a una de sus mujeres una misiva por medio de una paloma, diciendo: Esta paloma os transmitirá, como prueba de mi afecto, mensajes más olorosos y perfumados que las fragancias del 'abir".

Esta tarde, entre miradas azules y alevosas, germanas y lechosas, volví a percibir ese penetrante olor que pretendía estar enmascarado por jazmín y madreselva. A mi memória olfativa retornaron las tardes de inmersiones en el gran azul, cuando vivíamos de la pesca de langostas verdes y del milagro del ámbar gris. Y luego las noches tras los espejos, con el reflejo de las antorchas sobre el agua oscura, petrólea, densa. Cuando compartimos esos tres o cuatro segundos de ternura y los sueños de eternidad moruna, bajo la media luna creciente. Cuando me recitabas a Omar Khayam y temblabamos de miedo y placer aromatizado con menta.

Me pregunté el porqué entonces no tenía preguntas ni buscaba respuestas. Cuales eran las razones de tener cientos de canas de mas y decenas de cañas de mar.... Y así ando, a estas horas de la madrugada, escuchando lo último de Aute: Humo y Azar. Me quedo con el Azar, el humo lo dejo para las noches de jazz y wiskhey....

"Me va la vida en ello" de Aute